NIC 4356 Manejo de la conducta sexual

Definición NIC 4356 Manejo de la conducta sexual: Delimitación y prevención de conductas sexuales socialmente inaceptables.

La intervención de enfermería NIC 4356, “Manejo de la conducta sexual”, implica ayudar al paciente a comprender y manejar su comportamiento sexual de manera saludable y segura. Esta intervención es relevante en diversos contextos, incluidos pacientes hospitalizados, personas con discapacidades físicas o mentales, y aquellos que experimentan problemas de salud sexual.

Algunas actividades que pueden realizarse como parte de esta intervención incluyen:

  1. Evaluación de la conducta sexual del paciente: esto implica obtener información sobre las prácticas sexuales actuales, las preocupaciones relacionadas con la sexualidad y cualquier cambio en el comportamiento sexual debido a la enfermedad o discapacidad.
  2. Educación sexual: proporcionar información sobre la anatomía sexual, la salud sexual, la prevención de enfermedades de transmisión sexual, anticoncepción y la importancia del consentimiento mutuo en las relaciones sexuales.
  3. Asesoramiento: brindar apoyo emocional y orientación a los pacientes que enfrentan dificultades o inquietudes relacionadas con la sexualidad, como problemas de autoimagen, disfunción eréctil, dolor durante el coito u otras preocupaciones.
  4. Facilitar la comunicación: ayudar a los pacientes a hablar abierta y honestamente sobre sus necesidades y deseos sexuales con su pareja y proveedores de atención médica.
  5. Remisión a recursos adicionales: derivar a los pacientes a servicios especializados, como terapia sexual, consejería de pareja o grupos de apoyo, según sea necesario.

El manejo de la conducta sexual es importante para promover la salud y el bienestar integral de los pacientes. Al abordar las preocupaciones y necesidades sexuales de manera abierta y comprensiva, los profesionales de la salud pueden ayudar a los pacientes a mantener relaciones sexuales saludables y satisfactorias, incluso cuando enfrentan desafíos físicos o emocionales.

Actividades

• Identificar las conductas sexuales inaceptables, en función del contexto concreto y la población de los pacientes.
• Especificar expectativas explícitas (basadas en el nivel de función cognitiva y la capacidad de autocontrol) relacionadas con la conducta sexual o manifestaciones verbales que puedan dirigirse
hacia otras personas o hacia objetos del ambiente.
• Comentar con el paciente las consecuencias de la conducta sexual socialmente inaceptable y de las manifestaciones verbales de la misma.
• Explicar el impacto negativo que puede tener sobre los demás la conducta sexual socialmente inaceptable.
• Evitar la asignación de compañeros de habitación con dificultades de comunicación, antecedentes de actividad sexual inadecuada o gran vulnerabilidad (niños más pequeños).
• Asignar al paciente una habitación individual si ha sido valorado como de alto riesgo de conducta sexual socialmente inaceptable.
• Limitar la movilidad física del paciente (restricción de zona), si es necesario, para disminuir la oportunidad de conductas sexuales socialmente inaceptables.
• Comunicar el riesgo a los demás cuidadores.
• Proporcionar un nivel adecuado de supervisión/vigilancia para controlar al paciente.
• Emplear un enfoque tranquilo, concreto, al responder a las observaciones y conductas sexuales socialmente inaceptables.
• Reconducir cualquier conducta/manifestación verbal sexual socialmente inaceptable.
• Comentar con el paciente la razón de que la conducta/manifestación verbal sexual sea inaceptable.
• Presentar las consecuencias predeterminadas de la conducta sexual indeseable.

•Enseñar/reforzar habilidades sociales apropiadas.
• Proporcionar educación sexual, correspondiente al nivel de desarrollo.
• Comentar con el paciente las formas aceptables de realización de las necesidades sexuales individuales en privado.
• Desalentar la iniciación de relaciones sexuales o íntimas en situaciones de mucho estrés.
• Alentar la expresión adecuada de sentimientos sobre situaciones del pasado o crisis traumáticas.
• Proporcionar asesoramiento, según sea necesario, al paciente que haya sufrido abusos sexuales.
• Ayudar a la familia en la comprensión y manejo de las conductas sexuales inaceptables.
• Dar oportunidad al personal a que procese sus sentimientos sobre la conducta sexual del paciente que sea socialmente inaceptable.

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