Basófilos: estructura, función y alteraciones

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Los basófilos son un tipo de glóbulo blanco, o leucocito, que forma parte del sistema inmunológico del cuerpo. Son una de las subclases de los leucocitos granulares, que también incluyen los neutrófilos y los eosinófilos. Los basófilos son menos comunes que otros tipos de glóbulos blancos y representan aproximadamente el 0.5% al 1% de todos los leucocitos en la sangre periférica.

Estructura de los basófilos

Los basófilos son un tipo de glóbulo blanco o leucocito, que son células sanguíneas responsables de desempeñar un papel crucial en el sistema inmunológico del cuerpo. Aquí hay una descripción de la estructura básica de los basófilos:

  • Forma celular: Los basófilos son células de forma irregular y ligeramente más grandes que los otros tipos de glóbulos blancos, como los neutrófilos y los linfocitos. Tienen un núcleo lobulado que suele ser difícil de distinguir debido a la abundancia de gránulos citoplasmáticos.
  • Gránulos citoplasmáticos: La característica más distintiva de los basófilos es la presencia de gránulos citoplasmáticos grandes y oscuros que llenan su citoplasma. Estos gránulos contienen diversas sustancias, incluida la histamina, la heparina, la serotonina, la bradiquinina y otros mediadores inflamatorios y alérgicos. Estos mediadores químicos juegan un papel clave en la respuesta inmunitaria del cuerpo a las infecciones, alergias y otros desencadenantes.
  • Núcleo celular: El núcleo de los basófilos es lobulado y suele tener dos o tres lóbulos conectados por delgados puentes de cromatina. Aunque el núcleo es visible, suele ser difícil de distinguir debido a la abundancia de gránulos citoplasmáticos que llenan el citoplasma de la célula.
  • Tamaño y densidad celular: Los basófilos son células relativamente grandes y densas. En la sangre periférica, representan una fracción muy pequeña de los leucocitos circulantes, que generalmente está en el rango del 0.5% al 1%.

Funciones

Los basófilos son una parte esencial del sistema inmunológico del cuerpo y desempeñan varias funciones importantes en la respuesta inmunitaria y la homeostasis del organismo. A continuación se detallan algunas de las principales funciones de los basófilos:

  • Reacciones alérgicas: Los basófilos juegan un papel fundamental en las reacciones alérgicas al liberar histamina y otros mediadores químicos cuando se activan por la presencia de alérgenos. La histamina provoca una serie de respuestas, como la vasodilatación, el aumento de la permeabilidad vascular y la contracción del músculo liso, que dan lugar a síntomas alérgicos como picazón, enrojecimiento, hinchazón y dificultad para respirar.
  • Respuesta inflamatoria: Los basófilos también participan en la respuesta inflamatoria del cuerpo. Cuando se activan, liberan una variedad de mediadores inflamatorios, como histamina, heparina, bradiquinina y serotonina, que contribuyen a la inflamación local. Estos mediadores químicos aumentan la permeabilidad vascular, facilitan la migración de otras células inmunitarias al sitio de la inflamación y promueven la curación de tejidos dañados.
  • Defensa contra parásitos: Aunque su contribución es menor en comparación con los eosinófilos, los basófilos también desempeñan un papel en la defensa contra parásitos y otras infecciones parasitarias. Su capacidad para liberar mediadores químicos como la histamina puede ayudar a combatir la invasión parasitaria y promover una respuesta inmunitaria efectiva.
  • Modulación de la respuesta inmunitaria: Los basófilos pueden interactuar con otras células del sistema inmunológico, como los linfocitos T y las células dendríticas, y desempeñar un papel en la modulación de la respuesta inmunitaria. Por ejemplo, pueden secretar citocinas que regulan la activación y la función de otras células inmunitarias, contribuyendo así a la coordinación de la respuesta inmunitaria del cuerpo.

Alteraciones

Las alteraciones en los basófilos, al igual que en otros tipos de glóbulos blancos, pueden indicar diversos trastornos y condiciones médicas. Algunas de las alteraciones comunes en los basófilos incluyen:

  • Basofilia: La basofilia se refiere a un aumento anormal en el número de basófilos en la sangre periférica. Puede estar asociada con trastornos inflamatorios crónicos, como la artritis reumatoide, la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, así como con algunas enfermedades hematológicas malignas, como la leucemia mieloide crónica.
  • Basopenia: La basopenia es una disminución anormal en el número de basófilos en la sangre periférica. Puede ser causada por varios factores, como reacciones alérgicas graves, estrés físico o emocional, tratamiento con corticosteroides, infecciones virales agudas, enfermedades autoinmunes y deficiencias nutricionales.
  • Basofilia reactiva: La basofilia reactiva se refiere a un aumento en el número de basófilos en respuesta a ciertos estímulos, como infecciones parasitarias, reacciones alérgicas, inflamación aguda, estrés físico o emocional, y condiciones inflamatorias crónicas. Es una respuesta normal del cuerpo a estas condiciones, pero puede indicar la presencia de un trastorno subyacente si es persistente o severa.
  • Basofilia secundaria a enfermedades mieloproliferativas: Algunas enfermedades mieloproliferativas, como la leucemia mieloide crónica y la policitemia vera, pueden estar asociadas con un aumento en el número de basófilos en la sangre periférica como parte de su presentación clínica.

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