La presión arterial es la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias mientras es bombeada por el corazón y circula por el sistema circulatorio. La presión arterial se mide en milímetros de mercurio (mm Hg) y se expresa mediante dos valores: la presión arterial sistólica (la presión más alta durante la contracción del corazón) y la presión arterial diastólica (la presión más baja entre los latidos del corazón). La fisiología de la presión arterial involucra la interacción de varios factores y sistemas en el cuerpo.
Ciclo Cardíaco:
Sístole: Durante la sístole, el ventrículo izquierdo del corazón se contrae y bombea sangre hacia la arteria aorta, generando la presión arterial sistólica.
Diástole: Durante la diástole, el corazón se relaja y se llena de sangre, y la presión arterial disminuye hasta el nivel de la presión arterial diastólica.
Volumen Sistólico y Volumen Diastólico Final:
Volumen Sistólico: Es el volumen de sangre expulsado por el ventrículo izquierdo durante la sístole.
Volumen Diastólico Final: Es el volumen de sangre en el ventrículo izquierdo al final de la diástole.
Resistencia Vascular Periférica:
Vasos Sanguíneos: La resistencia vascular periférica se refiere a la resistencia que la sangre encuentra al pasar por los vasos sanguíneos, especialmente las arteriolas.
Regulación: La resistencia vascular periférica es regulada por cambios en el diámetro de los vasos sanguíneos, que a su vez están influenciados por factores como la liberación de sustancias vasoconstrictoras o vasodilatadoras.
Volumen de Sangre Circulante:
Influencia en la Presión: El volumen total de sangre circulante afecta la tensión arterial. Un aumento en el volumen sanguíneo tiende a aumentarla.
Elasticidad de las Arterias:
Compliance: La capacidad de las arterias para expandirse y contraerse en respuesta a los cambios de presión se conoce como compliance.
Importancia: La elasticidad arterial permite que las arterias absorban parte de la presión generada por el bombeo del corazón, contribuyendo a mantener la tensión arterial durante la diástole.
Sistema Nervioso Autónomo:
Simpático: La estimulación del sistema nervioso simpático libera norepinefrina, que provoca vasoconstricción y aumenta la frecuencia cardíaca, contribuyendo a un aumento en la tensión arterial.
Parasimpático: La estimulación del sistema nervioso parasimpático tiene efectos opuestos, induciendo vasodilatación y reduciendo la frecuencia cardíaca.
Regulación Renal:
Renina: La renina es una enzima liberada por los riñones en respuesta a la baja tensión arterial o bajos niveles de sodio. La renina activa el sistema renina-angiotensina-aldosterona, que aumenta la retención de sodio y agua, contribuyendo a aumentarla.
Hormonas Vasopresoras:
Vasopresina (Hormona Antidiurética – ADH): La vasopresina actúa en los riñones para conservar agua, lo que puede aumentar la volemia y, por lo tanto, la tensión arterial.
Aldosterona: La aldosterona aumenta la retención de sodio y agua en los riñones.
La regulación de la presión arterial es un proceso complejo y dinámico que implica la interacción de varios sistemas y factores. Un equilibrio adecuado entre la frecuencia cardíaca, el volumen sanguíneo, la resistencia vascular periférica y otros factores es esencial para mantener una presión arterial dentro de rangos normales y garantizar un suministro adecuado de sangre a los tejidos y órganos del cuerpo.