Formación de quelatos (farmacología)

La formación de quelatos se refiere a la unión de un metal con una molécula orgánica o inorgánica para formar un complejo estable llamado quelato. Los quelatos son compuestos en los cuales un átomo central metálico está unido a otros átomos, generalmente átomos de carbono, oxígeno, nitrógeno o azufre, conocidos como ligandos. Estos ligandos forman enlaces coordinados con el metal central.

En farmacología y medicina, la formación de quelatos también desempeña un papel significativo. Los quelatos pueden ser utilizados en medicamentos para mejorar la absorción, biodisponibilidad y estabilidad de ciertos compuestos. Aquí hay algunos ejemplos relevantes en el contexto de la formación de quelatos en farmacología:

  1. Quelación en Terapia Contra Metales Pesados:
    • La quelación se utiliza en el tratamiento de intoxicaciones por metales pesados, como el plomo, mercurio y cadmio. Agentes quelantes, como el ácido dimercaptosuccínico (DMSA) o el ácido dimercaptopropiónico (BAL), pueden unirse a estos metales pesados, formando quelatos solubles que pueden ser excretados por el organismo.
  2. Complejos de Hierro en Suplementos:
    • Los suplementos de hierro a menudo contienen compuestos quelatos para mejorar la absorción del hierro en el tracto gastrointestinal. El hierro quelado forma complejos más solubles y biodisponibles que el hierro inorgánico no quelado.
  3. Quelación en Agentes Antineoplásicos:
    • Algunos agentes antineoplásicos contienen ligandos quelantes que se unen a iones metálicos esenciales para el crecimiento celular. Estos quelatos pueden interferir con procesos celulares cruciales y tener efectos antitumorales.
  4. Quelación en Agentes Antimicrobianos:
    • Algunos agentes antimicrobianos pueden contener ligandos quelantes que se unen a metales esenciales para las funciones celulares de bacterias u hongos. Esto puede interferir con su crecimiento y supervivencia.
  5. Quelación en Agentes Cardiovasculares:
    • Algunos agentes utilizados en el tratamiento de enfermedades cardiovasculares pueden contener ligandos quelantes. Por ejemplo, los agentes que contienen el ion EDTA (ácido etilendiaminotetraacético) pueden usarse para quelar iones de calcio en el tratamiento de la calcificación vascular.

La formación de quelatos en el diseño de fármacos busca mejorar la eficacia, la selectividad y la tolerabilidad de los compuestos, así como reducir posibles efectos secundarios. La capacidad de los quelatos para modificar la biodisponibilidad y la distribución de los elementos metálicos es un aspecto importante en la farmacología moderna.

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